El Beco do Batman y el Street Art.
Sao Paulo es una ciudad a la que cuesta cogerle el gusto, a no ser que te des un paseo por el Beco do Batman en Vila Madalena. La megalópolis de Brasil con sus más de 16 millones de habitantes resulta a primera vista gigantesca, anárquica, ruidosa…
Pero pese a todos los inconvenientes es una ciudad vibrante y rebosante de actividad cultural. Entre las diferentes manifestaciones artísticas sorprende encontrarse con una ciudad plagada de grafitis. Y no me refiero aquí a esas fachadas de edificios decrépitos cubiertas de feas pintadas, sino al arte que se muestra en esos muros y paredes decorados con grafitis más que reseñables.
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El epicentro de este estilo de arte grafitero urbano se encuentra en el barro de Pinheiros en concreto en la zona de Vila Madalena. Muchas de sus calles en pendiente albergan algunas de las tiendas de diseño, talleres de artistas de vanguardia y galerías de arte más reputadas de Sao Paulo. Esta oferta cultural viva y moderna se complementa con una efervescente vida nocturna donde abundan bares y terrazas que pueblan las esquinas de muchas calles durante los fines de semana.
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Pero además Vila Madalena cuenta con una de las zonas de grafitis más coloridas, sorprendentes y reputadas del mundo en lo que se refiere a este tipo de «arte en la calle», el llamado Beco do Batman. Este callejón ubicado entre las calles Gonzalo Alfonso, Harmonía y Medeiros de Albuquerque debe ser el más colorista y uno de los más vivos de la ciudad. Y mira por donde, ironías de la vida, está situado a unas decenas de metros del Cementerio de Sao Paulo.
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Aquí las casas de los vecinos, las puertas de los garajes, los muros y hasta los postes de la luz, las aceras y el asfalto están decorados en una locura de colores vibrantes de formas oníricas. Artistas locales y extranjeros hacen cola para venir a pintar aquí y dejar su mensaje a veces irónico, otras veces crítico, pero siempre efímero.
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Cuentan que todo empezó en la década de los 80 cuando apareció un Batman de cómic pintado sobre un muro. Desde entonces los grafitis se fueron extendiendo por las calles adyacentes llenándolas de colorido y de diseños en constante renovación.
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Y esa es la razón por la cual muchos visitantes se acercan hasta este rincón para disfrutar con las nuevas obras de arte, y por qué no decirlo, lamentar la desaparición de otras realmente originales.
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Pintar en sus muros es todo un privilegio y los artistas siguen una serie de códigos que cumplen a rajatabla. Quien pinta en un trozo de pared se convierte en su propietario por un tiempo. Para pintar hay que solicitar una autorización previa ya que no se puede llegar y pintar encima de la obra de otro artista sin más.
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En las galerías de arte cercanas se puede preguntar al respecto. Si se encuentra una pintura desgastada o mal conservada se puede localizar al autor (todos dejan su firma) y preguntarle si va a renovar su obra. Este puede autorizar que se retoque, que se altere o que se pueda empezar un nuevo proyecto. Sin duda este es todo un exitoso modelo de autogestión y respeto mutuo.
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Os aconsejo venir de día, en concreto a mediodía para evitar las sombras y tener luz en los muros y paredes del estrecho y tortuoso callejón. Por la noche yo no me pasearía por aquí con una cámara, aparte de que no veréis casi nada. Este es un recorrido sencillo que no lleva mucho tiempo pero que merece la pena y que puedes complementar con una caminata por el barrio. Plantéalo como una visita a una galería de arte a cielo abierto con paredes totalmente decoradas de efectos psicodélicos y plagadas de energía creativa.
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Y por todas estas razones el Beco do Batman se ha convertido con el paso del tiempo en un lugar de obligada visita en Sao Paulo para los amantes de arte urbano. Y por si no os habíais dado cuenta, yo soy uno de ellos. Así te quedarás paseando por el Beco do Batman en Sao Paulo.
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Si quieres saber cómo llegar, sigue las indicaciones del plano. Es fácil. La manera más económica de llegar es usando el estupendo Metro de Sao Paulo. Enlaza con la Línea Verde destino Vila Madalena, y te bajas en la parada anterior, llamada Sumaré. Desde aquí te espera una una caminata de 10-15 minutos. Si quieres conocer Vila Madalena de noche te aconsejo usar un taxi.
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Finalmente, recuerda que un buen Seguro de Viajes te puede ahorrar preocupaciones y resolver muchos problemas. Así que ni lo dudes. Desde aquí te recomiendo MONDO, el seguro de viaje inteligente para viajeros inteligentes.
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