Siente, vive y disfruta Buenos Aires.
Buenos Aires, más allá de los tópicos, pide caminarla a pie para respirar el ambiente de sus calles. Con ese aire de capital europea pide que vayamos más allá del bullicio superficial para caer fascinados por sus rincones más secretos. Te llevo a conocerla.
Buenos Aires pide que nos detengamos en sus librerías; también que conozcamos sus restaurantes y locales nocturnos. Y por supuesto que vayamos al teatro, que escuchemos los omnipresentes tangos, que visitemos sus distintos barrios y que nos perdamos una y otra vez por sus calles. Sólo así te podrás hacer una idea de lo que esconde esta animada ciudad, la más populosa de Argentina y una de las mayores urbes del mundo con casi sus tres millones de habitantes, sin contar con los 13 millones del área metropolitana.
Estas son algunas de las razones por las cuales siempre es apetecible conocer y regresar a Buenos Aires. Y no tenemos que olvidarnos de su gente abierta, conversadora y dicharachera. Comprobaréis que los argentinos son una fuente de sabiduría, viejas historias y curiosas anécdotas.
Aquí voy a proponeros diferentes recorridos por BAs para que no os volváis locos dando vueltas. Como toda gran ciudad, al principio no es fácil discernir lo fundamental de lo accesorio. Sin embargo aquí son los detalles los que marcan la diferencia, los que imprimen carácter. Comenzaré por el centro histórico y comercial para continuar por algunos de los barrios más interesantes, porque cada uno tiene su idiosincrasia particular. Buenos Aires es una ciudad para caminar y pasear sin rumbo, poblada de rincones olvidados, de sabores intensos, vivos colores y sonidos porteños. Os llevo a descubrir ese algo especial que la hace única.
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1.- Desde la estación Retiro hasta la Plaza de Mayo
Nada más salir de la Estación Retiro, punto de partida para los trenes que parten hacia los alrededores de Buenos Aires, se encuentra una plaza en la que sobresale la Torre del Reloj o torre de los ingleses. Conociendo un poco la historia de confrontaciones entre argentinos e ingleses sorprende que esta torre sea un regalo de estos últimos. Y tampoco es casual que los argentinos hayan situado el memorial por los soldados muertos en la guerra de las Malvinas justo enfrente, a los pies de la Plaza San Martín.
Rodeando este memorial hay unas escalinatas que permiten acceder al parque donde se sitúa la estatua del general San Martín, héroe de la independencia argentina. Desde el mirador en lo alto del parque tendréis una vista general hasta la zona portuaria. El parque está rodeado por algunos de los edificios más conocidos de BAs como el del Círculo Militar de marcado estilo francés, o el edificio Kavanagh que en su momento fue el más alto de Sudamérica. Este es un parque popular donde en los días soleados los porteños que trabajan cerca vienen a comer o a descansar.
En un lateral de la Plaza se encuentra el acceso a la calle Florida. Es una de las principales vías comerciales de Buenos Aires con multitud de tiendas de ropa, souvenirs, oficinas de cambio, cafés, buscavidas, etc. En esta calle están las Galerías Pacífico, un gran centro comercial que es el paraíso de los adictos a las tiendas de moda. Tiene una decoración interior interesante, y es un buen lugar para tomarse unos alfajores y un café en los días de lluvia. También estaban en esta calle las sedes de los principales bancos que en los peores momentos de la crisis del 2001-2002 eran asaltados por masas de argentinos furibundos que habían perdido todos sus ahorros en el llamado «corralito«. Hoy las protecciones metálicas han sido retiradas, las pintadas borradas y las sedes de los principales bancos se han trasladado hacia la zona de Puerto Madero.
En la calle Florida os asaltarán los vendedores de las tiendas de ropa de piel. Es absurdo intentar pasar desapercibidos porque en cuanto abráis la boca todos reconocerán que vuestro acento no es argentino. También por aquí se plantaban los llamados «arbolitos», personas que se ganaban la vida ofreciendo cambio paralelo por tus dólares. Adentraros en los pasadizos y galerías comerciales que conectan la calle Florida con otras aledañas porque algunas, a pesar de su estado decadente, están ricamente decoradas. A pesar de que la calle Florida mantiene detalles de su antiguo esplendor, está claro que ha vivido tiempos mejores. Aún así siempre está muy animada durante el día.
Si os entra el hambre en la cercana calle Paraguay 489 se encuentra El Establo. Es un restaurante de los de toda la vida con una carta clásica de platos argentinos (esas milanesas napolitanas son inolvidables) con una parrilla excelente y algunos platos asturianos debido al origen de sus propietarios. La atención del personal y la calidad de la materia prima lo han convertido en un local casi siempre lleno de una fiel clientela. Cruzándose con Florida se encuentra otra gran calle peatonal, Lavalle. Hasta hace unos años aquí se encontraban las principales salas de cine de Buenos Aires. Hoy está llena de tiendas de todo tipo, de oleadas de gente que camina apresuradamente y de restaurantes argentinos. Entre ellos destacaría La Estancia (Lavalle 941) con una generosa parrilla donde podemos destacar unos jugosos y tiernos bifes de lomo o chorizo, junto a una buena atención, decoración estilo gaucho-pampera y precios asequibles.
Y así, entre maniobras de despiste y muchos «no gracias», podéis continuar hacia el final de la calle Florida hasta la Plaza de Mayo. Este concurrido lugar alberga, entre otros, tres de los edificios más emblemáticos de la historia de Buenos Aires.
Al fondo hacia el oeste, se encuentra la Casa Rosada, sede de la Presidencia de la República. Os aconsejo apuntaros a alguna de las visitas guiadas gratuitas que se hacen los fines de semana. Podréis recorrer sus salones, algunos despachos incluido el de la Presidencia, y asomaros al balcón principal cual presidentes de la Nación.
A la izquierda veréis la Catedral que, sintiéndolo mucho y tras haber visto otras muchas en América, no tiene nada de especial a excepción de albergar la tumba del general San Martín. A la derecha destaca el edificio blanco del antiguo Cabildo, sede de las principales instituciones políticas durante el período colonial español.
Aquí se encuentra parte del alma y el corazón de esta gran ciudad fundada por los españoles en este mismo lugar el siglo XVI. Ciudad que creció formando amplios círculos en torno a este antiguo centro y alrededor del puerto que bordea el Río de la Plata. Durante el siglo XIX y primera mitad del XX esta zona se llenó de edificios monumentales, muchos de marcada influencia francesa, y hoy sede de empresas, bancos, hoteles, y órganos del gobierno federal. La Plaza de Mayo es un espacio en general tranquilo a pesar del tráfico y de las manifestaciones, donde los tenderetes de recuerdos y las palomas conviven con los turistas y los paseantes. Pero no hay que olvidar que ha sido y todavía es un lugar clave de la historia argentina más reciente. Aquí han resonado los discursos de Perón y Evita, se han manifestado las abuelas de la Plaza de Mayo, y los excombatientes de las Malvinas siguen reclamando un trato y unas pensiones dignas.
Muy cerca de la Casa Rosada se encuentra el que ahora mismo es el lugar donde se concentra una de las mayores ofertas culturales y artísticas de BAs: El CCK o Centro Cultural Kirchner. Ubicado en lo que era la sede del Correo Central de Buenos Aires, fue inaugurado en el año 2015. A día de hoy todavía hay espacios a los que no se puede acceder, como la Terraza que se encuentra en la Planta 9. Aún así visitar este inmenso espacio dedicado a las diferentes expresiones artísticas es visita obligada.
El interior del CCK es de unas dimensiones descomunales, por eso es el cuarto mayor centro cultural del mundo en tamaño. El gigantismo de su interior sólo se entiende subiendo y bajando por sus escaleras mecánicas o recorriendo sus 10 salas de usos múltiples. Pero sobre todo quedando boquiabiertos ante lo que parece una enorme ballena metálica varada en el interior del edificio sobre la que flota una grandiosa lámpara de múltiples cubos azules. En realidad su nombre es «la ballena azul» y es una sala sinfónica para conciertos con capacidad para 1.950 espectadores. Algún día espero tener la posibilidad de poder disfrutar un concierto en su interior pues me han comentado que su acústica es excelente. Antes de viajar a BAs no dudéis en consultar su web para ver qué exposiciones o conciertos están disponibles los días de vuestra visita.
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2.- Desde la Plaza de Mayo hasta el Congreso Nacional
En la Plaza de Mayo y antes de enfilar la Avenida de Mayo, aprovechad para visitar el Cabildo. Aquí se explica la fundación de la ciudad y su desarrollo durante la época de la colonia. Desde la Plaza y tras casi 2 km. de agradable paseo urbano, llegaréis al parque situado frente a la mole arquitectónica del Congreso Nacional. Sus dimensiones hacen empequeñecer a los edificios aledaños y para los curiosos, informaros que se puede solicitar una visita a su interior.
Hasta llegar aquí la señorial Avenida de Mayo está flanqueada por algunos edificios interesantes. Quizás el más destacable sea el Palacio Barolo que tiene su gemelo en el centro de Montevideo, el Palacio Salvo. Ambas son obras del arquitecto italiano Mario Palanti y hasta 1930 fue el más alto de BAs. También en esta Avenida se encuentra el café más venerable de la ciudad, uno de esos locales clásicos de la vida bonaerense. Es el Café Tortoni fundado en 1858 y lo encontraréis fácilmente ya que comparte edificio con la Academia Nacional del Tango. A pesar de que siempre está lleno de turistas, conserva un ambiente propio gracias a su decoración original y a que cada noche presenta alguno de los mejores espectáculos de tango de la ciudad. Eso sí, es obligatorio reservar mesa con antelación. Pero pedir que no tenga una columna delante o acabaréis con las cervicales destrozadas y cabreados. Además se puede optar por cenar o sólo tomar una copa durante el espectáculo.
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3.- Alrededores de la Avenida Corrientes
Una vez aquí y si queremos volver hacia el centro por otro camino, podemos optar por otra caminata (¡¡¡oohh, los pies!!!) hacia una de las zonas más animadas de Buenos Aires tanto de de día como de noche: los alrededores del Obelisco y la Avenida Corrientes. Aquí se encuentran también la Avenida 9 de Julio, las calles Cerrito y Libertad, la Plaza Lavalle…Aquí, rodeado de teatros, comercios y mucho tráfico, se encuentra uno de los símbolos porteños por excelencia: el Obelisco.
Muy cerca destaca la presencia de los dos grandes teatros de la ciudad: el Teatro Cervantes y, sobre todo, el Teatro Colón, hito arquitectónico de Buenos Aires y joya de la corona de la brillante escena cultural de la ciudad. Está considerado uno de los mejores teatros de ópera del mundo. El Teatro Colón recibe con regularidad a compañías internacionales de danza y ópera y es la sede de la Orquesta Sinfónica Nacional de Argentina así como de la Compañía Nacional de Danza. Es el edificio teatral más grande e importante de Latinoamérica y fue inaugurado en 1908 con Aida de Giuseppe Verdi. A partir de 1925 pasó a ser el teatro municipal de Buenos Aires con el objetivo de convertirlo en el gran espacio cultural que es hoy.
Es de los pocos teatros en el mundo a los que se puede considerar una factoría de arte en la que trabajan 1.300 personas: pintores, tramoyistas, soldadores, carpinteros, modistas, sastres, zapateros y un larguísimo etcétera de profesionales que conviven junto a músicos y bailarines. Los tres niveles subterráneos adolecen del paso del tiempo, pero el interior del teatro con sus siete pisos donde caben 3.000 espectadores es impresionante. El único pero se lo podemos poner a las horrorosas pinturas de la cúpula que rodean la lámpara central de 7 m. de diámetro y tonelada y media de peso en bronce y bombillas. No dudéis en apuntaros a una visita guiada porque obtener una entrada para disfrutar de una representación no es nada fácil. Y preguntar antes si hay ensayo, porque aunque éste sea muy interesante lo disfrutaréis sólo 5 minutos. Y además no podréis disfrutar del espectáculo del teatro iluminado.
Otro de esos lugares que hay que visitar es la Cafetería Ideal con sus dos grandes salones, sus vitrales checoslovacos, sus arañas de cristal, sus farolas de bronce, sus vitrinas con porcelanas y muebles de madera tallada. Un lugar perfecto para reponer energías tomando un té, unos sándwiches o unos dulces, aquí llamados facturas. El mejor día para visitarlo es una tarde de domingo, cuando podréis disfrutar de los espectáculos de tango con decenas de parejas bailando en el salón del primer piso.
La oferta cultural es rica y abundante en Buenos Aires, y es en esta zona donde reinan cines, librerías y teatros varios con obras para todos los gustos. Merece la pena ver alguna de las obras en representación, pues además de encontrar calidad, pagaréis un precio bastante inferior al de cualquier teatro en Europa o los USA. Si tenéis la oportunidad, no os perdáis el espectáculo de uno de los más famosos grupos de teatro argentino: Les Luthiers. Os ofrecerán música e irónico humor argentino a raudales. Cada vez que viajo a BAs siento envidia sana al ver a miles de argentinos llenando los teatros y disfrutando de una oferta cultural que ya le gustaría a otras capitales del mundo.
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4.- Un nuevo barrio: Puerto Madero
Los antiguos muelles de carga de la ciudad se reconvirtieron hace unos años en un nuevo barrio de Buenos Aires. El más moderno y también de los más caros al estar en pleno centro de la ciudad. Los viejos muelles están ahora llenos de yates de recreo y los almacenes han sido transformados en apartamentos. Aquí se encuentran dos barcos-museo de la Marina argentina: la Corbeta ARA Uruguay y la Fragata Sarmiento.
En los locales a pie de paseo abundan los restaurantes italianos, japoneses y argentinos. Entre la amplia oferta de estos últimos tengo que mencionar La Cabaña de las Lilas, uno de los más finos y más caros restaurantes de BAs. Cuenta con un excelente servicio y buenas carnes, aunque nada que no se pueda encontrar en otros lugares de la ciudad sin necesidad de arruinarse. Justo Corrientes es otro restaurante con carnes de buena calidad, terraza dando a Puerto Madero y precios más asequibles. Otra opción de parrilla económica y muy popular es Siga La Vaca.
Si lo tuyo es la noche, en los bajos del Hotel Hilton se encuentra el Asia de Cuba, local en plan fashion donde abunda la pijería local y donde puedes llenar la barriga con comida fusión latino-oriental. Luego os podéis quedar cuando se apartan las mesas para disfrutar del ambiente discotequero. En verano no se está nada mal en la terraza y es un lugar perfecto para ir por la noche con amiguetes. Por lo demás, Puerto Madero es un paseo muy agradable ubicado muy cerca del centro, pero para comer o cenar, mejor otros lugares.
En toda esta zona se están levantando los rascacielos más modernos de Buenos Aires y su perfil va ganando con los años. Por detrás se encuentra la Reserva Ecológica de Costanera Sur, un gran parque por el que podéis daros una vuelta o ir a hacer deporte. Muy cerca se encuentra la Dársena Norte, donde se encuentran los muelles desde donde salen los barcos de Buquebus hacia los puertos de Montevideo, Punta del Este y Colonia de Sacramento, en la vecina Uruguay. Tomando uno de estos barcos es posible visitar Colonia de Sacramento en el mismo día. Si estáis varios días en BAs es una excursión más que interesante ya que su centro colonial es una pequeña joya.
Este paseo por Buenos Aires continúa en el siguiente artículo: Tour por Buenos Aires en 9 recorridos a pie. 2ª parte en el que te llevaré por el barrio de La Boca y su pintoresca calle Caminito, la zona más colorida de la ciudad; por el barrio de San Telmo y su Mercado tradicional; por el barrio de La Recoleta y su famoso cementerio; por las animadas calles de Palermo…y mucho más.
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Información práctica:
– Lo más probable es que llegues a Buenos Aires desde el aeropuerto de Ezeiza. Para ir hasta el centro te recomiendo tomar los colectivos(autobuses) de la compañía Manuel Tienda León. Los boletos se compran en la terminal del aeropuerto y el trayecto directo puede llevar más de una hora dependiendo del tráfico. Funcionan día y noche y tienen salida cada hora. Los taxis son caros y los autobuses públicos, aunque más baratos, son muy lentos. También se ofrecen trasporte privados en furgonetas llamados remises, pero es el servicio de trasporte más caro.
– Tened en cuenta que las distancias en BAs suelen ser enormes. Aunque aquí os he sugerido varios trayectos a pie, la mejor forma de moverse por Buenos Aires es usando el metro, aquí llamado Subte. El taxi es otra opción si las distancias a recorrer no son muy grandes o lo haces por la noche.
– Ten en cuenta que los precios en Argentina varían casi de un día para otro. La inflación hace que los precios se disparen, las tasas de cambio varíen, y el uso de la tarjeta de crédito implique el pago de comisiones adicionales. Hasta hace unos años existía un mercado paralelo de cambio de dólares con tasas de cambio muy alejadas de las oficiales. Incluso la cotización del “dólar blue” como se llamaba salía publicada en la prensa. Hoy en día el control estatal sobre este tipo de cambio lo ha hecho casi desaparecer. Aún así es recomendable viajar con dólares o euros, aunque cada día es más habitual poder sacar pesos argentinos de los cajeros sin que te cobren comisiones abusivas.
– Por último, el tema de la seguridad en Buenos Aires que aquí está en muchas conversaciones. Porque desgraciadamente con el deterioro de la situación económica ha ido empeorando con los años. Hasta hace relativamente poco la peligrosidad se limitaba a algunos barrios y en horario nocturno. Hoy los robos se han extendido hasta el centro de la ciudad, incluso a plena luz del día. Es recomendable no lucir joyas ni vestuario ostentoso, tener cuidado con los carteristas en lugares muy frecuentados como estaciones, y no moverse sólo de noche.
Por todo esto te aconsejo contratar un buen Seguro de Viajes con las mejores coberturas como el de MONDO. Recuerda que un buen Seguro de Viajes te puede ahorrar preocupaciones y resolver muchos problemas. Así que no lo dudes. Contrata tu seguro directamente desde aquí: MONDO, el seguro de viaje inteligente y tendrás un 5% de descuento.
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